Las escritoras más jóvenes

Por Óscar Fernández

“A pesar de todo sigo creyendo en la bondad humana”

                                                                                              Ana Frank

Todos las conocemos, eran niñas, y no por su corta edad sus obras tenían límites, esas pequeñas de almas inquebrantables vivieron en el cuerpo de la temprana infancia gestando historias que perdurarían en la historia de la humanidad.

Empezaré por Ana Frank, quien a los 13 años escribió su diario personal, el día que cumplió esa edad le regalaron un diario justo dos semanas antes de ser encerrada, ella vivía en Ámsterdam apilada con su familia y otras personas en un escondite en el que permaneció 2 años, justamente entre 1942 y 1944 escribió de primera mano todos los sucesos que la aquejaban, dejándonos ver la realidad desde la mente de una niña.

La joven nos habla de la convivencia entre las familias en aquel reducido espacio, y cuenta la situación que vivió en la época desafortunada para los judíos en la época de Hitler, desde la sinceridad y la esperanza de una niña con sueños. Ella jamás fue consciente de que su diario sería publicado, nunca pensó que llegaría tan lejos y lo escribe para sí misma, cargada de sinceridad y anhelos.

Ana murió en 1945 en un campo de concentración, y su padre fue quien consiguió rescatar el diario que publicó en 1947, Ana murió en aquel campo, pero su historia prevaleció a través del tiempo y su sonrisa acapara las portadas de varios movimientos, en la cubierta de su diario se dejó conocer su rostro para que podamos conservar más de su legado.

“No deseo que las mujeres tengan más poder que los hombres, sino que tengan más poder sobre sí mismas”

                                             Mary Shelley

Otra escritora fascinante es Mary Shelley, la novelista británica no solo creó una historia inolvidable, sino que creó una iconografía al escribir Frankenstein, es indiscutible la carga filosófica que contiene la novela, en un laboratorio un loco doctor con una chispa de electricidad engendra vida en un ser hecho de remiendos de cadáveres.

Es una novela de terror, pero también es una novela de esperanza, pues el monstruo tiene sentimientos, mata y destruye al salirse de control el experimento del científico loco que logra descubrir el secreto de crear vida, y su gran descubrimiento le lleva a esconder su monstruosa obra.

Shelley fue revolucionaria y transgresora, defendió a toda costa la independencia de las mujeres que estaban completamente excluidas de la vida social en el siglo XVIII. Con Frankenstein nos deja en claro que el monstruo es el símbolo de la orfandad, la carencia de la identidad humana, el no tener un hogar, un lugar seguro.

El villano de la novela es el doctor Víctor Frankenstein, un padre irresponsable que bautiza a su creación con su apellido, pero lo condena al abandono, a sacar a ese mal ser que habita dentro del monstruo donde cohabitan la bondad y la maldad. La escritora se refiere al doctor como el miserable, el desgraciado que deja a su criatura de reducida capacidad mental convertirse en un sanguinario.

Shelley con tan solo 18 años ya tenía escrita la novela, la misma que estuvo gestando durante su adolescencia, pero como era mujer no la pudo firmar con su nombre, nadie creería que esa historia fantástica hubiera sido escrita por aquella joven en el año de 1818.

La joven escritora nos dejó uno de los monstros más legendarios de la historia, pues hablar de Frankenstein es hablar de literatura, el prototipo de las novelas de terror, además de las incontables adaptaciones al cine y al teatro, una novela que ya lleva más de 200 años entre los lectores de todo el mundo.

“No hay peor prisión que la que nosotros mismos nos creamos con nuestras limitaciones mentales”

                    Susan Eloise Hinton

Para terminar con las jóvenes y brillantes escritoras, mencionaré a Susan Eloise Hinton con tan solo 16 años escribió Rebeldes. La novela se sitúa en una imaginaria ciudad muy parecida a la natal Tulsa, Oklahoma de la novelista y allí narra la lucha encarnizada entre dos pandillas de chavales jóvenes, unos que viven en condiciones desfavorecidas, los otros en la opulencia.

La joven escritora nos deja en claro el valor de la amistad y la diferencia de clases, absorbe y analiza el mundo en una manera más compleja y lo sintetiza en los sentimientos de sus personajes, que son leales a su bando, y sin importar su estatus tienen los roles bien definidos.

Amor, peleas, asesinatos, escuela, asaltos, nada que diste de la realidad, pero en su más conocida novela Hinton nos deja ver muy de cerca como estos jóvenes pueden sentir con ímpetu todas esas emociones que hacen de la novela un torrente de emociones. Dicho libro fue llevado al cine por Coppola.

Y ahora es que podemos concluir que para la genialidad no hay sexo ni edad, queda demostrado que estos tres ejemplos de jóvenes mujeres han aportado con sus letras mucho más que una historia, un sello para la humanidad.

Autor

  • Óscar Fernández

    Autor de 12 novelas con alto contenido social donde desnuda el alma humana . Entre sus temas frecuentes se encuentran la injusticia, el desamparo, la soledad y la forma en que las buenas personas salen adelante de los embistes de la vida. Ha entablado conversación con los grandes pensadores del siglo a quienes referencia en sus artículos. Habla inglés, francés, gallego, español y árabe. Ha trabajado por los desfavorecidos en Palestina y actualmente reside en México.

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