
Cuando hablamos de películas sobre maestros de escuela, ya sea en aula o deportivos, por lo general nos encontramos con las historias extraordinarias de los casos del millón. Donde un docente inspira a sus alumno a superarse, salir de su realidad y enfrentarse al mundo.
Esta es la fórmula común en el cine y la podemos ver en muchas películas desde Radical (2023) y Freedom Writers (2007), hasta clásicos como La Sociedad de los poetas muertos (1989) y Al maestro con cariño (1967).
Sin embargo esta rara vez es la realidad de la docencia. Con Un trabajo en serio (Un métier sérieux), el cineasta Thomas Lilti busca retratar la realidad del mundo de la enseñanza a través de los maestros de una escuela a las afueras de Paris.
La historia comienza con Benjamin (Benjamin Lacoste), un estudiante de física que renegó de la medicina y al no contar con una beca para terminar su doctorado, decide aceptar un empleo como profesor. Sin experiencia en la enseñanza, su camino nos llevará a las diferentes formas en que sus compañeros se relacionan con sus alumnos, dan sus clases y llevan su vida personal.
La maestra de ciencias con un hijo adolescente bully; la soltera que hace malabares con la custodia de su hijo, el maestro cool, que busca inspirar; el maestro de literatura que cada vez hace más aburridas sus clases y los maestros de deportes. Que pueden o no estar teniendo una aventura, mientras ella es casada. Además del director que es aficionado a las reglas, pero desentendido la mayoría de las veces de los problemas reales de su profesorado.

Sin perfer el foco en la historia del protagonista, que busca en youtube videos de cómo enseñar sus clases y es cobijado por una de sus compañeras. En el camino Benjamin además tendrá un roce con uno de sus alumnos que podría llegar a mayores consecuencias.
Maestros con problemas personales y profesionales reales, que además tiene que lidear con la supervición del Estado. Que les dice como tiene que dar sus clases, en un mundo en el que se les dice a los profesores que tienen que ser más entretenedores que educadores.
Un filme con el que todo aquel que a pisado un aula dándo clase en algun punto se sentirá identificado. Para los demás servirá para conocer una profesión más allá del mito popular, que es más compleja de lo que creemos.