James Gunn se despide de Marvel entregando una película de superhéroes que no solo confía en sus escenas de acción y los efectos espectaculares para conquistar al público. Además nos da momentos entrañables que romperán el corazón de muchos, especialmente de los amantes de los animales.
Guardianes de la Galaxia Vol. 3 no cae en la trampa de buscar conectar sus acontecimientos con todo el universo cinematográfico, lo que se agradece. Con tener una idea de lo que ha pasado con estos personajes en sus entregas anteriores y en el conflicto con Thanos es suficiente. Pero incluso llegar en blanco no afecta el entendimiento de la trama.
Los Guardianes reciben la visita de Adam Warlock, un ser con poderes parecidos a los de Superman, en su cuartel general en Nowhere. Adam busca venganza en el nombre de su madre. Después de un enfrentamiento, el equipo tiene que embarcarse en una misión para salvar la vida de uno de su miembros. Este acontecimiento es un pretexto para embarcarse en una última misión y encontrar a viejos conocidos, como Gomorra.
El humor que ha caracterizado a este equipo se hace presente, pero sin caer en el exceso. La historia muestra el desarrollo de los personajes, que han madurado bastante desde la primera vez que los vimos en 2014. Sobretodo Peter Quill como líder del equipo muestra momentos de madurez, aunque no abandona su lado desenfadado. Y Nebula, quien de ser una antagonista se ha vuelto parte crucial del equipo.
Drax, Mantis y Groot, también tienen sus momentos para brillar. Pero especialmente Rocket se lleva la película. Gunn aprovecha este volumen para mostrar los orígenes del personaje a través de flashbacks.
La historia de Rocket es tierna y entrañable, además de adentrarse en el maltrato animal en el nombre de la ciencia. Lo que probablemente vuelve al Alto Evolucionador el más cruel de los antagonistas del universo de Marvel.
La película tiene muchos personajes, pero destacan Kraglin y la perra Cosmo, que resulta adorable, aunque tiene poco tiempo en pantalla. Pero nuestro corazón pertenece a los amigos de infancia de Rocket, Lylla, Floor y Teefs.
Es imposible no amar a este cuarteto. Lylla Floor y Teefs representan el lado más inocente de la amistad y la familia. Mientras que los guardianes muestran más el lado familiar más conflictivo.
Aunque Gomorra regresa, no es el mismo personaje que conocimos en entregas anteriores. Su relación con Peter es un ejemplo de lo que pasa cuando idealizamos a las personas o a las relaciones pasadas. Lo que demuestra, que no podemos esperar lo mismo de las personas, aunque hayamos tenido relación con ellos anteriormente.
En el lado tal vez no tan positivo se encuentra Adam Warlock, un ser con poderes extraordinarios que tienes la mentalidad de un infante. Aunque su comportamiento es justificado, no llega a ser más que un instrumento narrativo.
La cereza en el pastel como siempre, cuando se trata de James Gunn es el soundtrack que contiene piezas de Radiohead, Faith No More, Alice Cooper, X, Beastie Boys, Florence + The Machine, Bruce Springsteen y The Replacements, entre otros.
Sin duda de lo mejor que ha hecho Marvel en fechas recientes.
Protagonizan Chris Pratt, Karen Gillan, Dave Bautista, Pom Klemetieff, Chukwudi Iwuji, Sean Gunn, Will Poulter, Zoe Saldaña y Sylvester Stallone. Con las voces de Bradley Cooper, Linda Cardellini, Asim Chaudhry, Mikaela Hoover y Vin Diesel.