“El hombre perfecto” es la divertida, entrañable y reflexiva película de la guionista, actriz y directora alemana, María Schrader. Quien recientemente estuvo involucrada como realizadora en la exitosa mini-serie de Netflix “Poco Ortodoxa” y es una de las protagonistas de la serie “Deutchland”.
El filme se centra en la relación que Alma (Maren Eggert) desarrolla con el robot humanoide Tom (Dan Stevens), quien fue diseñado específicamente para ser su pareja ideal.
La historia en esencia es una comedia romántica de ciencia ficción, pero la realizadora se da el tiempo para reflexionar sobre varios aspectos de la convivencia humana. Como funciona (o no funciona) el coqueteó, la convivencia, la vejez de los padres, el autosabotaje, la soledad y la belleza en la Historia (la de H mayúscula). Todo desde el punto de vista de una mujer en su cuarentas, que es soltera, científica y atea.
Alma participa en un experimento de tres semanas, para explorar las implicaciones éticas de la convivencia con los robots humanoides, como sustitutos de la compañía humana ante la soledad, la depresión o la pérdida. Pero lo hace a regañadientes para obtener fondos, para una investigación que busca la belleza en el escritura sumeria. Cuyos textos más antiguos son administrativos. Además de lidiar con la vejez de su padre, que presenta síntomas de demencia y con otras relaciones y traumas del pasado, que iremos descubriendo a lo largo de la trama.
Por su parte Tom, con la ingenua y divertida interpretación del actor inglés Dan Stevens, en un inicio nos muestra la idealizada y romántica visión que tenemos sobre del amor y el romance. Que se muestra intencionalmente cursi, para efectos de comedia.
El escepticismo de Alma y el idealismo o ingenuidad de Tom chocan, para mostrarnos la forman en que la relaciones humanas se adaptan para ser exitosas. Porque a pesar de que Tom esta diseñado para ser la pareja ideal de Alma, no es a través de sus gestos románticos que logra penetrar en su armadura, sino a través de sus acciones, sus comentarios sin filtro y sus dudas existenciales.
El filme esta basado en una historia corta de la escritora alemana Emma Braslavsky y en alemán tiene por nombre “Ich bin dein Mensch” que se puede traducir como “Soy tu hombre” o como me gusta más a mi “Soy tu humano”.
“El hombre perfecto” se encuentra disponible a través de Primevideo, después de su reciente corrida comercial en algunas salas de arte de México.